“Servicio de información telefónica prestado por SERVICIOS TELEFONICOS DE ATENCION AL CLIENTE SL ”
En primer lugar, es muy posible que ahora mismo te estés preguntando: ¿qué es una tarjeta revolving? Puesto que no es muy común oír hablar de ellas o al menos no con ese nombre específico. Esto tiene fácil solución, ya que, a continuación, vamos a explicarte todo lo que necesitas saber sobre las tarjetas de crédito revolving. La principal diferencia entre una tarjeta de crédito y una tarjeta revolving es que, quienes usan una tarjeta de crédito posponen el pago para el mes siguiente sin recargos, sin embargo, quienes usan una tarjeta revolving, el pago se aplaza en varias cuotas y es el cliente el que decide el importe de dichas cuotas. Esto conlleva una serie de intereses que son ineludibles. Antonio Gallardo, quien cuenta con prestigio y es experto financiero en iAhorro, para diferenciar las tarjetas de crédito de las tarjetas de revolving, apunta a los elevados créditos que ponen a disposición la elección de forma predeterminada del pago a plazos y que este pago tiene unas cuotas muy bajas. Dicho esto, ¿con qué riesgos podríamos encontrarnos si utilizamos una tarjeta revolving? En primer lugar, los intereses asociados que tienen dichas tarjetas son muy elevados, precisamente porque la cuota que se deberá abonar mensualmente es demasiado baja, con lo que, el pago no amortizará la deuda y, como consecuencia de ello, ésta seguirá creciendo. Por poner un ejemplo, Patricia Suárez, que es la presidenta de Asufin, dijo lo siguiente: “si compramos por 1.000 euros a crédito revolving, en poco tiempo, ya debemos esa misma cantidad en concepto de intereses”.
A todo esto, probablemente algunos estén pensando: ¿acaso es legal establecer unos intereses tan sumamente elevados? Muchas son las sentencias que se han presentado denunciando unos productos que son poco transparentes y con unos intereses realmente abusivos. Desde Adicae, recuerdan que el Tribunal de la UE apoyó la doctrina del Supremo para anular contratos con tarjetas revolving por ser considerados una “usura” cuando se supera determinado tipo de interés.
Aunque pueda resultar difícil de creer, existen numerosas tarjetas que tienen estas características y que están asociadas a una ONG o a algunas obras sociales. Aunque lo cierto es, que en estos casos, los intereses que se cobran son destinados a financiar una ONG o a un grupo desfavorecido. Es cierto que, últimamente, las tarjetas de crédito se están convirtiendo en el aliado de muchas personas, porque, ante una situación de crisis, pueden servir para paliar la falta de dinero de numerosas familias que tienen que enfrentarse a una serie de pagos. Sin embargo, debemos tener mucho cuidado con los plazos de pago y los intereses, porque podrían complicar aún más nuestra situación, en vez de aliviarla.